Mittwoch, 15. Dezember 2010

Una carga pesada


Querido lector:

Son las 22.31, ya un poco tarde, pero aún son horas de escribir. Sin más preámbulos os voy a contar una cosa que me pasó ayer. Hablé con una chica que va conmigo a la facultad y que, como he descubierto, también es vecina mía. Bueno, resulta que me agregó en Facebook, y cada vez que me conectaba y ella estaba conectada me empezaba a hablar, recordando chistes bastante malos que yo había hecho en su momento por mera cortesía y a los que yo no les daba ni la menor importancia. Pero ella se acordaba, y eso me sorprendío bastante. Por lo general me debería haber sentido halagado, ya que no todos los días te encuentras con una persona que se acuerda con tanta exacitud de tus palabras (bastante imbéciles) y se toma tanta molestia por contactar contigo. Me sentí halagado, pero la chica no llamó mi atención. Por qué? Sinceramente, porque no tiene ningún tipo de atractivo físico, excepto ojos azules, pero eso se ve mucho en Alemania.

Sé que suena cruel lo que digo, pero muchos nos guiamos hasta cierto punto por el lado físico de una persona. Por mucho que nos guste decir: "A mí lo que me importa es el interior.", siempre buscamos un cierto nivel de atractivo físico. Porque la frase de arriba no es mentira, pero sólo una media verdad. Sinceramente, yo nunca he salido o he tenido algo con una chica que no me pareciese hasta cierto punto atractiva, de hecho me han parecido más atractivas las chicas con las que he salido que con las que sólo que tenido una relación esporádica. Y parece ser que no soy el único. Muchos de mis amigos (y yo también) hablan de mujeres a nivel físico como si hablasen de coches. Como bien se podría oír "El nuevo Volvo no tiene un buen ABS, pero tiene una cilindrada bastante potente" se podría también bien oír entre chicos "Carolina no tiene una cara demasiado agradable, pero tiene unas peras bastante respetables". Curioso, verdad?

No quiero limitarme al simple tópico "Los medios de comunicación nos han lavado el cerebro y controlan nuestros gustos femeninos", pero en parte parece ser que sí. A un buen amigo del colegio le parece que Robin (de "Como conocí a vuestra madre") está "to buena". Y cuando a veces voy por mi facultad veo a chicas maquilladas, con abrigos limpísimos, con el pelo como un maniquí... y pienso :"Estamos en la universidad o en la Cibeles?". O la típica chica que tiene un cuerpo normal, no flaco, pero para nada gordo, que te dice al borde del ataque de pánico: "Oh Dios, ayer me comí un Döner, hoy sólo ensalada para comer!!!". Esto a los hombre en parte nos parece gracioso, curioso, como si fueses al cine a ver una peli de humor. Y oír a esas chicas hablar da ganas de comprarse palomitas, os lo prometo. Y cuando no son maniquíes, al menos buscamos que tenga algo fuera de lo común, que nos recuerde que hay personas salvajes, en contra de las concepciones de la sociedad burguesa, como una chica con rastas, o con un tatuaje, o con varios piercing, etc.

Pero por mucho que los hombres nos mantengamos supuestamente al margen de estos asuntos "banales de belleza", en gran parte somos los responsables de esta locura que tienen las mujeres por ser guapas o distintas de alguna manera. Porque cuando decimos que Robin está "to buena" delante de una amiga , o que X es un callo malayo porque tiene los dientes hechos un cisco, o que nos gustaría menternos en la cama con Giselle Bündchen, etc. eso se le queda grabada. Porque, o naces guapa y no tienes que trabajar demasiado para ganarte el respeto de los hombres o naces normalita y es como tener un segundo trabajo o naces fea y te preparas para un trauma bastante gordo. Problemas que no suelen afectar al sexo masculino. Y lo dice Zhang Jie, escritora china: "Para una mujer no hay nada más doloroso que ser fea. Una verdadera desgracia."

Un saludo maquillado,

Guillermo

Dienstag, 30. November 2010

El miedica!


Querido lector:

Son las 1215 hora zulú. Una hora más en Madrid y en Heidelberg, así que son las 13.15 o la una y cuarto. Hoy he decidido escribir algo porque no tenía mucho que hacer. Verdaderamente. Tenía que hacer una presentación a estas horas, pero han suspendido la asignatura de hoy y tengo libre. Así que he decidido hacer algo "útil" (escribir en el blog) por algo útil que no he podido hacer (la presentación). Y sabéis lo que me ha motivado a hacerlo? El miedo.

Es cierto, siempre tengo miedo de que me pase algo malo. Ayer nevó y tuve miedo de refriarme, así que me abrigue como si me estuviese obligando mi madre a ello. Camiseta, camiseta de manga larga, forro polar, armadura medieval y chaqueta de invierno. Pantalón de pijama debajo del normal. 3 pares de calcetines y botas impermeables. El munyeco de michelín. Y eso es sólo un pequenyo ejemplo.
Cuando tenía novia siempre usaba protección, para evitar tener hijos, yo, tan joven. Cuando estoy con mis amigos tengo "dolor de cabeza", por evitar meterme en follones, yo, tan tranquilo. De hecho no me he sacado el carnet de conducir por no tener un accidente. Ni tampoco pregunto demasiado a la gente por no descubrir secretos desagradables. Tampoco hablo mucho por no decir tonterías. En Alemania no tengo huevos a meterme en el Megaupload, no me vayan a pillar bajándome el disco de Menganito y me metan el puro del mes.
Todo empezó cuando era aún un feto. Salí 19 días antes para que mi madre no se olvidase de que había un ser enano en su vientre. No bebía mucho de su pecho, no me fuese a dar una indigestión. Cuando tenía 7 anyos comía mucho porque pensaba que el día de manyana se iba a acabar la comida. A esa edad hasta dije que veía mal por si algún día veía mal de verdad y necesitaba las gafas.
Cuando besé por primera vez a una chica no metí la lengua, no fuese que ella no se había lavado los dientes y me pasaba las caries. A un buen amigo tardé en conocerle bien, porque como es negro, a lo mejor era malo.
Antes no bebía mucho, porque decían que era malo para el hígado y acortaba la vida. Ahora bebo más, no sea que tarde una eternidad en morirme. No estudio mucho porque temo que mi cerebro se sature y no quepa más en él. Me fui de Espanya el anyo pasado porque temía vivir la crisis.
Como estos casos habrá unos mil más, y no os voy a aburrir con los detalles. Como véis, tengo mucho miedo de todo, por eso ahora mismo no sé si acabar ya con la entrada, no sea que os penséis que hago las cosas en modo "random" y nunca más os volváis a meter en la página... Pero me voy a lanzar!

Un saludo un poco menos miedica,

Guillermo (o no?)

Donnerstag, 25. November 2010

Perro pachón


Querido lector:

Son las 21.05. Vuelvo a disculparme porque otra vez he vuelto a tardar mucho en publicar, y tampoco es plan de que a la paginilla le crezcan telas de aranya.

Resulta que hace poco tiempo me criticaron porque supuestamente soy un vago. No es broma. La persona en cuestión me dijo: "Eres un perro!". Y se quedó tan pancha la persona esa. Como si yo, andando a 4 patas y dándole la patita a quien me cae bien, hiciese danyo a alguien.
Por qué qué otra opción me queda? En serio, hay muchos por ahí que no me dejan ser un perro. Estar a mi aire y andar por la calle.

Además, voy a muchos sitios por la noche y sabéis lo que veo? Perras. Pero un montón. Y esas son las que me llaman vago. Irónico, verdad? Y sino me lo dicen perras, me lo dicen las más sofisticadas, que son las gatitas. Esas se meten en los garitos maullando a veces tan alto que el resto de gente se entera de que ellas lo que quieren esa noche es leche. Porque eso es lo que les gusta a las gatitas, no? La leche! Y amigos míos, que han estado con gatitas, me cuentan que por la zona inferior del cuerpo huelen a pescadilla! Está claro, todo el día comiendo pescado, no queda otra! Pero las peores son unas de mi misma familia, la de los cánidos. Son las zorras, que como te pillen te meten en su madriguera y te dejan hecho... pues eso, unos zorros.

Además, cuando voy a la facultad está lleno de lobos. Es un abuso. Y algunos de ellos, además de darte zarpazos y pavonearse de sus músculos, se unen en manada y van en busca de borregos a los que tener bajo control. Ya sabéis lo que dicen de los borregos, que son "mu" tontos. Pero lo más chungo de los lobos es que no dan la cara. Para que los borregos no se enteren, los lobos se meten bajo la piel de cordero, así los borregos no saben que son unos capullos como una casa y los saludan con los brazos abiertos. Y algunas de las borregas, con las patas abiertas...
Una vez me uní por curiosidad a esos lobos y nos fuimos de fiesta. Yo soy un perro pachón, y claro, como no tengo tanta energía no aguanto tanto. Pero ellos sí que aguantan un montón. Y sabéis por qué? Porque ellos suelen venir de sitios fríos, donde hay mucha nieve. Y aunque estén lejos de casa, siempre llevan un poco de nieve y se la restriegan por los hocicos para recobrar esa energía que normalmente tienen en sus hogares. Y entonces se ponen agresivos. Reganyan los dientes y aullan :"Uuuh, vamos en busca de conejitos!". Se meten en las discotecas a cazar conejitos! Así lo hacen, tío, no es broma.

Yo sólo os digo que no me parece del todo mal ser un perro pachón. Con la de perras, gatitas, zorras y lobos que hay ahí fuera lo mejor para mí es ser lo que soy, un perro pachón. Y aunque me llames Golfo, ten claro que algún día habrá una Reina por ahí y nos iremos a comer espaguetis hasta que nos salgan por las orejas. Sé lo que me vais a decir, que esta vida a veces es muy perra y que el mundo está lleno de hijos de perra... Pero así es, la vida es un hueso duro de roer.

Guau guau,

Guaullermo



Mittwoch, 13. Oktober 2010

El filtro


Querido lector:

Son las 20.16 y creo que está va a ser corta. No es por vagancia, simplemente que ahora estoy en ese momento raro de tener ganas de hacer una cosa pero no las suficientes como para llevarla a cabo del todo, no sé si me consigo expresar con exactitud. Hace poco tuve una crisis emocional, y ya sabéis, con el tiempo libre, etc. uno se monta sus fantasías y demás. Por eso hoy, en la resaca del hecho en sí me pongo a escribir sobre él para digerirlo un poco más. Lo que más me chocó fue una cosa: que las cosas no son como pensamos que son.

Y ni siquiera como pensamos que son. Como queremos que sean, que es más lejano a la realidad todavía. Ahora os puede dar la impresión de que yo os voy a relatar una historia de traición y mentiras. Para nada. Es una historia cotidiana, pero cuando pasa nos parece a veces que debemos ser la única persona a la que le tocan tan malas papeletas. Y ahí está la clave del asunto. Hay veces que pasan cosas, buenas o malas (para nosotros como persona). Nosotros entonces le damos una interpretación (p.e. y a grandes rasgos, que sea buena o mala para nosotros), ya que es ineludible que un hecho que nos afecta directamente no pase por ese filtro que es nuestra propia percepción.

Pues eso me pasó. Salí de una relación intensa, y eso me sentó bastante mal. A la otra persona supongo que también, pero como no soy esa persona no os puedo relatar su punto de vista con demasiada exactitud sin caer en valoraciones propias, tanto implícitas como explícitas. Después de la separación procuré encontrar todo tipo de razones del por qué. Y así me surgieron 1000 teorías, cada cual más aterradora que la otra. A causa de esas teorías me surgió una cierta reafirmación de mí mismo, idea que contaminó en ese momento bastante mi percepción de la otra persona. En un momento de ira le hice saber lo que pensaba de la separación y la actitud de la otra persona hacia esa separación. Pero con el tiempo y el diálogo con la otra persona me di cuenta de que esas confabulaciones eran sólo mis impresiones creadas por la crudeza de la situación. Ahora, con algo más de distancia (tanto física como mental), me he dado cuenta de que las cosas no son como creo que son ni como quiero que sean, son como son.

No puedo daros una moraleja. Sólo recomendaros que en situaciones límite lo mejor es mantener la cabeza fría y examinar lo más objetivamente posible las CAUSAS de esa situación límite para comprender el suceder de esa situación límite. Por mucho que miremos el paisaje por arriba, por abajo, con gafas de sol, a través de una cámara de fotos o con una lente concava ese paisaje seguirá siendo el mismo (por suerte). Mucho me da la impresión que nos fijamos a veces más en el filtro (nosotros) que en la situación en sí. Así que procuremos librarnos de esos filtros, que más que una ayuda son un distorsionador que nos puede causar más mal que bien.

Un saludo pensativo,

Guillermo

Mittwoch, 22. September 2010

De por qué comencé a darle dinero a los yonquis


Querido lector:

Son las 22.53 de un miércoles. Lo primero, disculparme por mi vagancia, que sé que no tengo la popularidad de Almudena Grandes (por suerte), pero la falta de disciplina no es perdonable. Parece ser que llevo mis dos mesecitos sin publicar, de buen rollo. Pues hoy vuelvo al ruedo, ya que hay un tema que me crispaba en su momento profundamente. Lo conocemos todos, y creo que no soy el único al que le crispaba, y seguro que hay muchos a los que aún les crispa.

El tema surgió hace unos años ya. Iba yo tan tranquilo en el vagón del Cercanías y pasa el típico yonki gorrilla pidiendo dinero "para comer". "Valiente listillo", me pensé yo en mi infinita sabiduría, "tú lo que quieres es mi dinero para comprarte jaco y ponerte a gozarlo sin que yo me entere". "Pues vas listo", me pensé en mi infinita sabiduría. Cuando pasó al lado mío le eché una mirada furtiva y dije el mítico "No llevo nada". El tío siguió andando y pidió al resto de pasajeros que quedaban. Pensé yo en mi infinita sabiduría que pocos le darían algo, y así fue. Dos de unos aprox. 40 pasajeros le dieron unos céntimos.

A ver, seguro que ese tío necesita su dosis, y al no darle la gente casi dinero el hombre estará obligado a practicar actividades indecorosas para conseguir la sustancia preciada. Por ejemplo, se tendrá que ir a algún polígono industrial a hacer de chapero para ganarse unos míseros 15 euros. O tendrá que atracar a algún chaval joven del barrio. O hasta tendrá que robar a algún compañero suyo de andanzas. O cualquier otra cosa. Vaya puteo, pero él se lo ha buscado, por drogadicto e irresponsable. Además, está consumiendo sustancias ilegales.

¿Pero somos nosotros mucho mejores que ese yonki? Es cierto que no tenemos pinchazos en los brazos ni la voz mellada ni olemos mal ni estamos sucios. Pero nosotros también le pedimos dinero a nuestros padres y abuelas "para estar con los colegas". Y bien que luego corremos al camello o al chino o al garito para conseguirnos nuestra sustancia. Y si no nos lo dan nuestros padres , vaya cabrones que son por no pagarnos la juerga, vamos donde el colega que no soportamos, pero que es rico y nos da dinero para un litro o unas caladitas y le comemos la oreja con lo bien que nos cae y la ropa tan chula que lleva y lo buena persona que es. Eso, lógicamente, no es el pene de un viejo en tu culo,pero después de tanta falsedad si que nos sentimos un poco sucios. Y a las últimas, a meterse en la habitación de los Santos Papá y Mamá y robarles un par de eurillos, que es por una buena causa, no te jode.

La verdadera conclusión de este artículo es que los vicios son un puteo como la casa de Madonna. Pero a la que quiero llegar es que hay que mirar un poco al espejo antes de llamar yonqui gorrilla al prójimo. No os incito a fundar una ONG para pagarle la heroína a los yonquis, pero si a darle unos céntimos a esos que como nosotros también tienen sus vicios inconfesables.

Un saludo gorrilla,

Guillermo

Dienstag, 20. Juli 2010

Buenas noches, amigos!


Querido lector:

Son las 22.23. He vuelto al blog. Pasé este blog a amigos, conocidos y familia y recibí opiniones de toda clase. Algunos me dijeron que mola, otros que debería depurarlo más y otros que parezco un cocainómano cuando escribo esto. Y hay comprender y respetar todo.

Este blog surgió a través de lo que surgen la mayoría de los proyectos: las ganas de hacer algo. Suena tonto, pero es así. Hubo un momento en mi vida en el que yo me pregunté si algunas ideas que tengo sólo las debía verbalizar o también las debía escribir para ver si otros están de acuerdo o en desacuerdo conmigo. Como bien sabemos, para gustos los colores. Todo empezó así: resulta que un día un colega me ensenyó el blog de un amigo suyo. En ese blog su amigo publicaba reflexiones, poemillas o vídeos. Y yo pensé: "Pues sí que podría estar bien esto". Así que me senté al ordenador y abrí mi cuenta de Blogger para también yo poder publicar para la gente lo que se me pasaba por la cabeza. Y así surgió mi primer textillo que trataba el tema de la masturbación masculina en edad pubertaria.

En el fondo sé que muchos escribimos, y no en un blog o para que lo lea la gente, como hago yo ocasionalmente. Me refiero a sentarse en una silla o tumbarse en la cama y ponerse a transcribir lo que se nos pasa por el colodrillo. Más de uno me comentó después de leer esto: "Eh, tío, pues yo también un día me puse con el cuaderno a escribir mis movidas y estuvo bastante bien."
Me alegro de eso, porque en la sociedad en que vivimos (sé que es el típico topicazo) no nos damos mucho la oportunidad a nosotros mismos para dedicarnos un ratillo. Hay tantas cosas interactivas que nos atrapamos, o nos distraemos tanto que al final tenemos el cerebro tan frito que no tenemos ni ganas de seguir pensando lo que se nos paseaba por la mente. Un buen ejemplo es el medio a través del cual publicó: internet. Internet es tan grande que hay mucho que explorar, mucho que descubrir, pero en múltiples algo muy importante que perder, el tiempo.

Por eso, no confies mucho en el blog. He estado mirando a más gente que publica y a veces el contenido es un tanto dudoso. Yo, por ejemplo, os quiero aclarar que es mi punto de vista. En el caso de que lo leáis es para que podáis comprender un poco por qué actúo como actúo, o por qué digo lo que digo. Pero lo que no me gusta o lo que no apruebo son esas personas que se meten en un blog para llenarlo de basura. Si se escribe en un blog pienso que hay que mantenerlo siempre a nivel personal. No ponerse a predicar ideales de un par de progresistas que van de comunistas mientras se compran pantalones de Carrharrt y gafas Ray Ban. Sinceramente, si escribes en un blog diciendo que bebes café de comercio justo o le donas 6 euros a la semana a Greenpeace a mí me la trae floja, flojísima. Al igual que los que se ponen una foto que han modificado con colores sepia en su perfil y que aparecen con el pelo despeinado, una rebeca masculina y sonrisa traviesa, pero sexy. Esto puede sonar a que os estoy contando rollos que se me han ocurrido durante ralladas de amarillo, pero es lo que pienso también sobriamente.

La conclusión de este texto no es más que la defensa de uno mismo. No de la individualidad. A lo que me refiero con esto es que en el ámbito cultural se ha puesto mucho de moda parecer una persona casual, relajada, liberal,"individual", mientras a mucha verdaderamente buena gente se les tilda de gilipollas, incultos y gente pasada de moda. Este texto se lo dedico a las feministas que van medio desnudas por el mundo reivindicando sus derechos de mujer, a los "gafa-pasta" que hablan de política en cafeterías chic, a los universitarios con humor inteligente, a los que alquilan locales para fumar porros y escuchar música "chill-out" y a muchos más de la fauna humana. Yo aún le abro las puertas a las chicas.

Un saludo,

Guillermo

Montag, 12. Juli 2010

Qué pasa ahí?

Qué pasa ahí?/
en mi cabeza siempre es Halloween/
aunque el cuerpo me pida tasca/
cada cubito es un cacho de Alaska/
y si mi corazón algún día casca/
será porque una arteria se atasca/
y cerveza tras cerveza que me rasca/
lo único enfrascado será mi alma/

Qué pasa allá?/
en mi cabeza ahora es Janucá/
y aunque el cuerpo me pida bar/
cada ron es arena de Zanzíbar/
y si mi corazón algún día jubila/
será porque una vena bastante vibra/
y pis tras pis que me libra/
lo único liberado será mi vejiga/

Dienstag, 29. Juni 2010

1. f. Hato o rebaño pequeño de ganado que está al cuidado de un pastor.


Querido lector:

Son las 15.26, así que hoy escribo con total control sobre mis actos y enunciados. Hace pocos minutos estaba escuchando una canción que a mi parecer es muy buena que se llama "El cuentacuentos" de un hombre llamado Nach y me quedé pensativo. Me surgió una duda muy típica, por desgracia nada original, pero ya que tantos tratan con ella yo no quería ser menos. En esta canción se trata el tema de la individualidad, de lo difícil que es alcanzarla y de los obstáculos que ello plantea. Por ello busqué en la página web de la Real Academia la palabra "manada" y el título es la primera definición que salía. Pero es que acaso somos todos parte de alguna manada y acaso algún día podremos ser lobos esteparios, como dice Hesse?

No quiero chafar el final, pero realmente no lo sé. Muchos, cuando pensamos en manada, le damos la acepción negativa, como si nos refugíasemos en una gran masa anónima para nunca tener que enfrentarnos a nosotros mismos, a modo del conocido "camuflaje". Es cierto que cuando andamos por la calle muchas veces vemos a gente con gesto serio, con trajes grises o negros y con un maletín colgado de una de sus dos manos y nos preguntamos si verdaderamente se dedican a lo que desean, si esa oficina en la que se encierran 10 horas al día verdaderamente les aporta felicidad, si ese dinero que cobran de un jefe de dudosa moralidad les parece justo. Y admito que es fácil pensar eso sobre esas personas, ya que ellos son uno de los productos más obvios de la sociedad "anonimizante" que en las últimas décadas ha surgido. Pero somos nosotros diferentes a esos que "abrazan a sus maletines con instinto maternal", como dice Nach?Imaginémonos que trabajamos en un trabajo que nos brinda libertad, que nos deja elegir nuestra manera de hacer las cosas, como por ejemplo podría ser un profesor de instituto por vocación. Tratas con jóvenes, les ves crecer, les educas (en ciertos sentidos) y puedes dejarles tu granito de arena para que les ayude en el camino que les queda por andar. Pero no estaríamos nosotros también cenyidos a trabajar 40 horas semanales y a obedecer a un plan de estudios que nos dicta un grupo de personas poderosas cuyo nombre y cuyo carácter no conocemos? Así que de pronto nuestra supuesta libertad de actuar nos resulta limitada por un ente grande y desconocido, ese que nos convierte a todos en ganado y que nos pastorea aleatoriamente mientras nosotros nos contentamos con poder pastar y asegurarle (con suerte) un poco de hierba a nuestros corderos para el día siguiente.

Lo que no sé tampoco es si verdaderamente todos vivimos en una gran pompa que nos convierte en un manojo de carne y hueso para mantenernos controlados mientras cada uno de nosotros, desamparadas briznas, se siente más solo que la una. En mi humilde opinión, veo una gran verdad en ello, pero también veo que muchos de nosotros tendremos al menos otra brizna que comparta nuestras torceduras y características, con la que podremos hablar y sentirnos como solidísimos alcornoques. Y con ello no me refiero a un novio o una novia, sino unos padres, que trabajan y sudan por tu bienestar, un buen amigo, que te conoce bien, o a lo mejor ese oficinista que sale cansado de su trabajo de 10 horas que se sienta al lado de ti en el tren, que sabe lo que es tener un jefe mandón o una mujer que le agobia por tener un móvil Nokia.

Al fin y al cabo, como ya he dicho, no sé bien como funcionan las cosas, sólo sé que vida solo hay una y que hay vivirla como a uno mejor le parezca: fundirse el sueldo en cocaína y una discoteca de moda a fin de mes, vivir aislado en un monte con lo justo para comer a modo de evasión o aceptar la dureza mental y física de nuestra estancia en el planeta azul y pasar nuestros ratos libres con seres que queremos y/o apreciamos o solos sin procurar hacer danyo a nadie.

Un saludo pensativo y dubitativo,

Guillermo

Sonntag, 27. Juni 2010

Cambiar de aires


Querido lector:

Son las 23.55, exactamente, 5 minutos antes de medianoche, en 5 minutos será lunes, el peor día de la semana, como solemos decir. Atrás quedaron juergas, momentos de relax y bonitas experiencias de las que seguramente el fin de semana que viene ya ni te acuerdes. Pero para mí los fines de semana ya no son lo mismo. Y es que parece que ya todo está quemado, rumiado y probado. Las mismas discotecas, las mismas tascas, los mismos planes, y con el agobio de la monotonía (no confundir con rutina) parece que hasta la misma gente. Lo que me hace falta a mí es un viajecito de esos de un fin de semana a algún sitio desconocido o poco visitado.

Es lo que suele pasar. Como todos los fines de semana se adoptan los mismos planes, pero con leves variaciones nos vamos aburriendo del tema, y nos hace falta una escapadita para notar que nuestros planes a lo mejor no son tan aburridos como pensamos, simplemente que los repetimos demasiado. A mí me pasó eso. En las vacaciones entre cuatrimestre y cuatrimestre me pegué tantas semanas de bote en bote que cuando empezó el semestre deseaba en secreto volver a la "monotonía" de los fines de semana, aunque las vacaciones me hubiesen parecido maravillosas. Ahora me pasa a la inversa. Anyoro esos viajes, porque llevo desde mediados de abril sin pegarme una escapada en condiciones. Pero después de esa escapada seguro que aguanto sin percances otras 3 semanitas más sin quejas. Si ojalá el cambio de aires fuese siempre tan simple de perpetrar sería lo máximo. Con irte cada 8/9 fines de semana durante 2 días de viaje para recargar bastaría. Pero (sin querer parecer un bohemio con ansias mundanas) a mí no me pareció en su momento suficiente. 15 anyos en Madrid, con escapaditas, sí, pero me quemé. Así que decidí emigrar a Heidelberg, una ciudad que sólo conocía por pensadores alemanes que ni siquiera he leído. Parece una locura, pero pienso que las decisiones que tomas basadas en lo que te susurra la boca del estómago a veces pueden ser las acertadas. Y es que yo en Madrid sólo conocía a 3 verdaderos amigos (ellos saben quienes son), a unos cuantos colegas , a mi familia, a unas cuantas chicas y a una ciudad con mucha mala baba. Por eso decidí cambiar de aires. Ir a un sitio donde no te conozca nadie, encontrar a gente, que uno encuentre su sitio y que se monte su vida ahí durante un más o menos breve lapso de tiempo. A veces me pregunto por qué mis colegas, con todas las oportunidades que tenemos, se han quedado en la ciudad en la que se han criado. Por qué no cambiar de aires? Por qué no conocer un país que sólo conoces del instituto? No les quiero tachar de cobardes, el cobarde seguramente lo fui yo por no aguantar ahí ni 1 mes más y huir precipitadamente a Alemania. Pero es que ellos también la conocen sólo de un punyado de viajes y de lo que se les contaba en el instituto. A pesar de haberme pirado echando leches, me enorgullezco de haber tomado la oportunidad que me brindaron mis padres para cambiar de aires. Desde el portátil un brindis de champán ficticio por ellos.

Terminando con una conclusión un tanto típica, a lo mejor la vida son sólo unas cuantas semanas en las que pocas veces podrás escaparte durante 2 días, pero a lo mejor nos gusta nuestra casa y, como bien se dice, como en casa en ningún sitio. Pero a lo mejor también podemos irnos de escapada cada fin de semana y hasta mandar al carajo al jefe un jueves para irnos 5 días por ahí. Yo he puesto el tablero, y aquí cada uno mueve como quiera, que los juegos no son por competitividad, sino para divertirse y conocer a gente.

Un saludo perdido,

Guillermo

Mittwoch, 23. Juni 2010

Y otra noche más...


Querido lector:

Son las 1.25 y me pasa lo de siempre. Creo que a ti, sí, a ti también te habrá pasado. Es la típica noche, que sin saber al 100% por qué, no puedes dormir. Yo lo que hago en estas noches es muy típico de pensador americano. Ahora me he puesto un poco de jazz que me ha pasado un colega y estoy disfrutando un poco escribiéndoos casi a tiempo real lo que se me pasa por la cabeza.
Es tarde por la noche. Ya sólo una persona te habla por el "messenger" y se mosquea porque no le prestas del todo atención. Te metes en la red, buscas tonterías que hace unos anyos con fervor anhelabas y ahora te sorprendes que en su momento te fascinasen tanto. Ahora esa persona te dice por chat que te echa de menos, y en ese momento se te echan las 4 paredes encima. La hora del lobo. Cuando, a mi manera de ver, se tiene la mente más lúcida pero por desgracia menos atenta. Los pensamientos van y vuelven, a veces se ahorran el billete de vuelta y se pierden un un rincón del que saben que no reaparecerán en largo tiempo. Cuando manyana sea por la manyana y me despierte fresco y recuperado de tanto no hacer nada, leeré este texto y me extranyaré de haberlo escrito. Morralla o genialidad es lo que se tiene a estas horas. Un sentimiento igual de gratificante que doloroso, y notas que ambos son intensos. Hoy aprovecho la oportunidad y me siento un rato delante del ordenador, parece que no tengo ni que pensar, que mis dedos van subiendo, bajando, de izquierda a derecha, teclado arriba, teclado abajo por mero gozo. Pero es tarde, y la única persona que está conectada ya te dice que está cansada y que pretende dormir, pero le cuesta despedirse de ti, y a ti de ella. A pesar de todo, manyana será un nuevo día y podré escribir un texto más o menos esquematizado de lo que maquin0, pero en una noche como esta sólo se puede dejar fluir a la mente, que salga lo que quiera.
Este texto no es nada increíble, ni tampoco recomendable, pero tú, que por las noches sientes esa tensión y ese cansancio tan presentes, espero que te sientas identificado con un servidor. Pues resulta que al final el texto sí me ha fatigado...

Un cordial saludo desde el insomnio,

Guille

Dienstag, 22. Juni 2010

Y la mujer gritó: "Goool!"



Querido lector:

Son las 13.31, hora curiosa y capicúa, capiriosa o caprichosa, como me gusta llamarla. "Qué la mujer gritó qué? Ya vuelve con las gilipolleces el payaso este!" Si es que es eso, me dais la oportunidad de dejaros mis chorradas en un tablón y no me lo pienso dos veces. Lección que aprendemos en el primer párrafo: No ofrezcas algo que no quieres ofrecer, porque el rechazo por cortesía no es eterno. Bueno, pero eso poco tiene que ver con lo que os quiero contar hoy. Pues resulta que ayer jugó la Selección Espanyola (no del Espanyol, simplemente ni tengo esa letra en el teclado, "cagüendios"!) y ganó. Más o menos meritoriamente pero ganó, menos quejas de aquellos que siempre se cagan en los equipos cuando pierden y los ponen por las nubes cuando ganan. El Mundial ya no es un fenómeno masculino, ha trascendido.
Las mujeres están pillándole el gustillo al esférico. Yo aún no del todo. Miro algunos partidos de Liga y Champions y el Mundial, pero eso sí, me vicio al "Pro" (Pro Evolution Soccer). No os sabré narrar una crítica futbolística convincente. Hostia, qué me voy del tema! Siempre me pasa, que me dan vahídos y me pierdo. Volvamos. Así que las mujeres le están pillando el gusto al balón redondo que a tanta gente vuelve loca en el planeta. Ayer estábamos unos cuantos sentados en un bar viendo el partido y una mujer detras de mí gritando como una loca: "Yo soy espanyol, espanyol, espanyol!" o "A por ellos, oé!". Y yo me quedé "cuahao". Pensé: "Mierda, ahora a gritar también las mujeres?". Y no quiero ser machista. De hecho, la (antigua) pasividad femenina ante el deporte rey me tranquiliza mucho. Son las cosas que nos suelen pasar, hay ciertas cosas por las que un género suele mostrar mucho más interés que el otro, y al ver la pasividad del otro género nos relajamos de la tensión que notamos le causa al otro. Con los hombres es el fútbol, con las mujeres la prensa de corazón. Lo sé! Topicazo! Pero es innegable que la Liga la ve muchísima gente y los programas de corazón siguen ahí porque los ve muchísima gente. Marca, el periódico más vendido de Espanya, Hola la revista más vendida de Espanya. A lo mejor no estoy siendo tan tópico.
La conclusión es simple. Procuro no ser conservador, así que mujeres de Espanya: Seguid viendo cuanto fútbol quérais. Y hombres hispanos: Comprad cuantas revistas de corazón como quérais. Lo único que espero es no ver a mujeres bonitas borrachas en el bar con bufandas del Madrid y a hombres peludos en la peluquería haciéndose los rulos...

Montag, 21. Juni 2010

No, no, sin condón!


Querido lector:

Son las 18.02 y volvemos con los temas serios. "Vaya vara que pega el tío!", os pensáis. Pues sí. Tengo múltiples intereses, estoy interesado en cienciología, pornografía, vidalogía, en mujeres y su companyía, en tías, en la CIA, en pornografía también, por si se me olvidaba, en la grafía de la hache, en tortía (como diría un teutón), en porterías y por último, en pornografía. Pues resulta que hace poco estaba dándome una cibervuelta por YouTube (o llutuf, como le gusta llamarle a los modernos) y encontré una canción que en mis tiempos mozos escuchaba mucho. Es de un cantante hispano-guineano que canta sobre la protección durante la práctica sexual. Ciertamente, muchos nos lo tomamos a broma, ya que nos solemos quedar con el humor de una canción seria narrada humorísticamente, al igual que en las películas, como p.e. "La comunidad", de Álex de la Iglesia.

A veces me pregunto por qué el sexo causa tanta tensión. El acto en sí es muy relajante y ejercita a los viejos y jóvenes para que no se queden del todo mustios depués de pasar el día sentados en el pupitre, silla o demás mobiliario para reposar las nalgas. Por ejemplo decimos: "Me encanta follar!". Así, por la cara, sin tapujos ni hostias, que se entere "toa" la penya. Ale! Tan frescos! A vivir, que son cuatro días! Pero cuando lo hacen gente diferente nos quedamos asombrados, a veces hasta asqueados. Vamos por un afamado barrio de Madrid de renombre entre los LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales) y pensamos: "Hostia, aquí se nota que hay mariconeo..."Pero por qué? Ellos no tienen derecho a sobarse, magrearse y penetrarse como lo hacemos las gran mayoría, heterosexuales salidos? Parece extranyo, porque el fenómeno no acaba ahí. Cuando vemos a este colectivo actuar siempre pensamos: "Mierda, este truchilla que no se me arrime que seguro que es un sidoso de aúpa!". Dos fallos, del tirón:
1. Que sean gays no implica que tengan enfermedades de transmisión "sessuar"(Chiquito-style)
2. Que les gusten los hombres no quiere decir que te vayan a bajar los pantalones y petarte el cacas, que tan guapo no eres, y eso hasta te lo dice tu novia, que te quiere.
Limitarse al colectivo LGTB sería muy fácil. Sigue con un colectivo bastante más mayoritario: la Iglesia (católica, todo sea dicho). Para ese colectivo, el sexo no es bueno. No! No te pases con el deseo carnal, que Dios te va a meter un par de leches por disfrutar. A mí me pasa que me dan miedo. "Puto loco!", pensaréis. A lo mejor, pero ver a un montón de familias del PP con camisitas de Polo y pinta de buena gente gritando que la convivencia entre LGTB es un crimen en contra de nuestra Santa Naturaleza a mí me mete un miedo en el cuerpo que ni os lo creéis. En serio, eso de ver a mucha gente reunida por el odio y rechazo es un trago, y no es uno bueno.

Voy a terminar por hoy, una mujer con la que me lo voy a pasar como un chavalín está a punto de llegar y juntos queremos chinchar un poco a los de las sotanas con un poco de relaciones prematrimoniales. Bueno, querido lector, espero que chinches (siempre desde el carinyo) y pinches (ídem) con mucho amor y libertad.

Un saludo desde mi cueva,

Guillermo

Mittwoch, 16. Juni 2010

Cuando el amor es una red social


Mi amol!

Hola, querido lector, son las 1.04 de la manyana y parece ser que me cuesta dormirme por un tema (o TEMpestAd, como me gusta llamarlo) que me azota bravamente contra las paredes del cráneo. Hace poco me conecté al “messenger”, esta red donde se mete una pila de gente y que sirve para chatear con los que aprecias y para agregar a gente que casi no conoces por el mero hecho de ver tu lista de “amigos” más cebada de lo normal. Ahí leí un “nick” (título que pones como representante de tu dirección de correo electrónico) que decía (traducido) “El amor no es un sentimiento… es mucho más!”. Hmmm. Mucho más? QUÉ es el amor?

Hace poco acompanye a una chica que me gusta mucho al médico para una revisión. Ella tuvo un problemilla en la rodilla y simplemente tenía que volver para ver qué tal progresaba. A pesar de ser una excelente hablante del alemán, si un médico nos habla en nuestra primera lengua extranjera es posible que nos dé un pequenyo ataque de pánico. Pero bueno, eso no viene demasiado al caso. Como yo tuve el privilegio (sin ánimo de pretensión) de ir a un colegio alemán tengo menos dificultades que ella al entender a este gremio. Así que la acompanye por si había problemas. Más tarde, al leer el “nick” previamente mencionado me quedé pensativo. Acaso actué en este caso por amor? No es un poco fuerte decir que en ese caso actué por AMOR? A lo mejor no, a lo mejor sí. Podría haber sido altruismo puro y duro, pero, para seros sinceros, tampoco soy San Pablo. Visto de otra manera, ni siquiera actuar a favor de alguien tiene que ser por amor. Así que, en ese sentido no me pude responder a mi pregunta.

Cuando observé la página de otra red social, Tuenti, de la persona que escribió el “nick” en cuestión vi que (ella, para seros sinceros) tenía colgadas fotos con su novio (no es homosexual, para que veaís que este ejemplo es general), los dos dándose besos fervorosos y con caras de película de amor. De pronto pensé: “Esto es amor?”. Esa persona me transmitió que amor no era una cosa entre dos personas, sino una cosa entre dos personas a las que se le suman sus centenares o miles de observadores. Alto!Halt!Arretez! No me entendáis mal, no es que yo sea un cotilla y esté poniendo su felicidad a parir. Simplemente me parece curioso. Si dicen que el amor es más importante que el sexo, porque no cuelga la chica fotos de los dos haciéndolo salvajemente? Ahora pensaréis: “Pero Guille! Cómo se puede ser tan salido y tan indecente?”. No, lectores. Desde el punto de vista que da la chavala, el amor es algo extraplanetario y ultraíntimo, no? “El amor no es un sentimiento… es mucho más!”. Comprended que ella lo que nos quiere transmitir es que (desde SU punto de vista) amor es una cosa personal e intransferible. Entonces por qué cuelga fotos de los dos en su acto, su ceremonia, su ritual más personal e intransferible, un beso, y eso varias veces? No sabría deciros con exactitud, pero os puedo dar la humilde opinión de un tío que parece ser bastante corto de miras, como lo soy yo.

El amor que se hace público no parece ser el amor del de verdad. Cuando vemos esas fotos entranyables pensamos: “Dios, qué bello y magnífico que dos personas se amen de tal manera!”. Pero cuando había bodas pomposas y lujosas entre un príncipe y una princesa de reinos diferentes para que luego se convirtiesen en un reino más poderoso todavía, era amor? De sobra es sabido por todos, por eso omitiré autorresponderme como un listillo. Pero seguramente soy un chavalín imbécil que no sabe lo que es el verdadero amor y nunca sabré decir que quiero a alguien. Lo que sé deciros con certeza es que a la que habla muy bien alemán la acompanye con muchísimo gusto al médico.

Un saludo,

Guille

Dienstag, 15. Juni 2010

Un asfalto que me ama



Un asfalto que me ama
por la ciudad discurre
Grande Gris, que me escupes
sólo muestras tu alma

Asfalto, si aún me amas
espero que procures
no querer ver más nubes
pues gota ahora es llama

Asfalto, sé que me amas
espero que me excuses
Muy abrazado a una farola estuve
Mi cuerpo se entrelaza con una almohada

Asfalto, ya no me amas
y ya no me disculpes
sobre ti me tumbé
y tu cara estaba helada

Montag, 14. Juni 2010

Acerca de la cultura

Querido lector:

Son las 11.10. La hora para hablar de temas serios. En serio, hoy voy a procurar ir en serio. Estuve hace un momento en el váter y se me ocurrió una cosa. Pensé en lo que verdaderamente es ser "una persona culta". Con esto no quiero concretar en qué ámbito, sino simplemente una cultura general.
Muchas veces, aún no diciéndolo, nos consideramos cultos. Al menos me pasa a mí. Sonará vanidoso, pero es así. A mí me gusta leer de vez en cuando. Leo a lo mejor un libro por mes o cada dos meses, tampoco una burrada. Pero cuando acabo un libro pienso: "Jo, ahora SÍ me siento culto. He aprendido algo o he sacado alguna conclusión que me va a dar un punto de vista más amplio sobre uno o varios asuntos." Pero eso es así? Leer un libro, ver un documental o tomar una clase con un profesor de renombre nos hace, como se dice, más "cultos"? Por lo que parece, sí, un medio nos proporciona un conocimiento que antes nos era desconocido y enriquece un poco más nuestro saber. Cierto. En ese sentido no pongo en duda la cultura, pienso que está claro que aprender algo nos hace, aunque sea sólo un poquitín, algo más cultos (NO se confunda con inteligente!).
A lo que me refiero es el cómo manejamos este conocimiento adquirido. Acaso lo atesoramos y lo hacemos nuestro a través del pensamiento y el desarrollo propio o lo tergiversamos? Con tergiversar me refiero a pervertir lo adquirido objetivamente convirtiéndolo en algo completamente subjetivo. Por ejemplo, observamos una estadística en la que se observa que los homosexuales en ciertos países africanos son perseguidos por tribus por su orientación sexual. Nosotros sacamos rápidamente la conclusión: Los africanos son unos salvajes intolerantes.
He aquí la tergiversación. Son ciertas tribus (ni siquiera en toda África) las que practican estas carnicerías, no el colectivo africano. Este ha sido un ejemplo extremo, pero lo necesitaba para aclarar a lo que me refiero.
Esto suele ser un fallo muy común. Cultura y personalidad están lógicamente entrelazadas, pero a veces la personalidad se puede convertir en un arma de doble filo. En la política se ve un ejemplo muy ilustrativo. Muchas informaciones adquiridas son manipuladas o sólo mostradas en parte para justificar ciertas actitudes o acciones. Al igual a estos "artistas" tan cultos y sofisticados que se ven por la tele hablando con periodistas de revistas progresistas en cafeterías elegantes. Nosotros les vemos discurrir y nos quedamos en el sitio, pensando: "Guau, este hombre es un genio!". Pero si nos paramos a escuchar, todas esas ideas y sabidurías que profesa el artista o crítico con tanta (aparente) soltura se suele quedar en humo de paja. Triste pero cierto, así parece funcionar la élite cultural de hoy en día, y tampoco este texto se queda sin condena, ya que lo que aparentemente tenemos la gran mayoría de cultos en realidad lo tenemos de pretenciosos, incluyendo a un servidor.

Un saludo,

Guillermo

Donnerstag, 10. Juni 2010

Artihta!

Querido lector:


Son las 23.30. La hora perfecta para hablar. Hablar? Soy un artista, mira como me fluye el texto por los dedos. De la mente a los dedos, de los dedos al teclado, del teclado esta rara pantalla blanca que edita los textos escritos, y por último, de esta rara pantalla blanca que edita los textos escritos a la red (o ourl uaid ueb, como decimos los entendidos). "Déhate de rolloh", me dice mi doble andaluz, "siempre pensando en shorradah y calentándole la cabessa a la pe
ña!". Doble, qué soy un artista! Pero qué es un artista?

Pintar cuadros agarrando la pata de tu perro, que está manchada de pintura verde, y restregarla por un lienzo para más tarde decir que estás creando "arte moderno" no parece plausible. A lo mejor aprender a tocar la guitarra de oído y rasguear acordes de Sabina cantando de tu relación fallida con una escultora checa que hacía estatuas con basura reciclada lo es. "Illo, qué va!". Vale, vale, tienes razón, doble. Mira, antes de seguir escribiendo te voy a poner un nombre, doble. Te voy a llamaaar....! Francisco Javier! Sí, sí, me gusta, un nombre guapo para una "musa shunga". Bueno, "Cicoviéh", y grabar cortos en un pueblo en medio de Castilla la Mancha sobre un antiguo oficinista palentino que escapa a un pueblo pequeño de Toledo para encontrar a su verdadero ser? "Mira, piezah, veo que ehtáh máh que perdío, ereh un jodío melenudo y ese eh tu problema, déhame ya a mi bola!" Hala, a fastidiarse, yo, artista consagrado en el Círculo de Bellas Imbéciles Univesitarias Que Se Creen Todo (CBIUQSCT) estoy consagrado. Me he acostado con varios de los miembros del jurado, y eso en cristiano (como diría la gente poco sofisticada) quiere decir que no soy cualquier pera, sino la limonera. Me siento mal, porque hasta ahora la musa andaluza, la voz en España durante el romanticismo, no me ha sabido ayudar, la muy,..! Recurriré a la voz que inspiró al visionario de la literatura más importante en nuestro pobre país: la voz de Castilla la Mancha (o la Vieja, como preferimos decir los instruidos). Doble manchego, andas por ahí? "Oye, no me toques los huevos que se me hinchan las pelotas cada vez que vienes a menearme el escroto!". Pero, doble manchego, me acabas de decir tres veces lo mismo. "Mira, por mí que te den por el ojete..." . Bueno, tú en realidad también deberías conseguir un nombre digno de manchego, un nombre cristiano, divino, como a Dios le gustaría...Rubén! Uno de los 12 hijos de Jacob, si!

(Mucho tiempo después)

Había probado con mi otra musa y no funcionó. Como se ve, los artistas de verdad no tenemos una musa fija, como pretenden hacernos entender algunos que se consideran artistas. Los artistas de hoy en día ya nos vivimos ni de musas, ni de inspiración. Vivimos de un hecho totalmente falsable, la sociedad. Ella nos inspira una vida real en la que lo real parece fantástico y lo fantástico en realidad es la realidad. Por confusa que parezca esta paradoja, para nosotros es un hecho que lo que es un hecho debe ser un hecho. Mis explicaciones pueden ser indescifrables, pero no es lo indescifrable la cifra más exacta que existe en una realidad que no es real? Los artistas de verdad ya nos vemos que el pez se muerda la cola, sino que la cola busque y cierre la boca del pez justo cuando ella se encuentra dentro. La filosofía del arte ha sido descifrada por un aparente imbécil "Don Nadie" que es un genio. O a lo mejor no debería haber comido tantos brownies de marihuana....

Un saludo desde el mundo artístico,

Guillermo

Montag, 10. Mai 2010

Estudiar?!

Querido lector:

Son las 16.16h. La hora perfecta para hablar de temas de interés de cada ámbito: cultural, social, pornográfico, universitario, escolar, estelar, bilateral, multilateral, lateral, especial, pornográfico, gráfico, de tráfico, de ático, del hogar, maternal, fraternal, paternal, pornográfico o lo que sea.
Hoy voy a hablar de un tema, querido lector, que en mi mocedad me robaba tiempo valioso, pero me satisfacía a la par. Hablo de un tema sucio. Un tema tabu. Un tema asqueroso. Pero un tema muy natural, ya que está en la naturaleza de cada adolescente. Es un dilema que debe existir desde que existen las escuelas, sobre todo las de educación secundaria. Un dilema que se debate entre el cerebro y el miembro viril. Sí!, lector, has leído correctamente. Los sesos y los genitales tienen enfrentamientos míticos, séase por ejemplo la batalla épica entre la idea de no enrollarse con la chica maníaco-depresiva del tercero y la de hacerlo por recompensarse físicamente por años de no ligar y esperar en vano a ese pedazo de mujer que cumpla todos tus deseos y te traiga tiras de bacon calientes a la cama cuando amanece! Pero hoy, lector, hoy es el día D, la hora H, el minuto M, el segundo S!!!

Hoy, estimado lector, quiero confrontar al público masculino por horas de estudio perdidas. De joven se tenían grandes pretensiones después de echar la siesta. Resolver cada raíz cuadrada, interpretar cada poema de Fray Luis de León y aprenderse la tabla entera de elementos para dar por el ano a ese/esa profesor/a puñetero/a que siempre te intentaba pillar en los exámenes. Se lo ibas a demostrar, joderle, chafarle sus ideas de chafarte, a fin de cuentas: darle su merecido a ese sarnoso hijo de perra! Pero la lucha genitalo-cerebral no es sólo un conflicto que se libra pensando en la vecina, no, también al estudiar. Al principio es un breve revoloteo que aletea por tu hueca cabeza preadulta. Piensas que no pasa nada si introduces esa palma y cinco dedos en el calconcillo y te das un relajante pseudomasaje en los testículos. Por ahora todo va bien. Pero no durará, joven Padawan. La carne es débil, y siendo tan joven es debilísima, frágil, insostenible. Así que al final tragas saliva y apartas el libro pensando que lo retomarás en un cuarto de hora, ya que tú en realidad lo que quieres es estudiar para mostrarle al profesor lo que vales de verdad. Pero no. Terminas y sueles sentir un cansancio "inexplicable" que no puedes reprimir, así que comienzas la archiconocida "siesta de 10 minutos". A fin de la jornada no has hecho nada, tu espíritu sexual adolescente sigue igual de indómito. Felicidades, estudiante!

Cuál es entonces la conclusión de todo este asunto? Verdaderamente, no la sé. Así que os dejo con una hipótesis que les encanta a los científicos que estudian la naturaleza: No somos ni más ni menos que animales.

Saludos cordiales,

un tío con (demasiados) huevos